
Hoy, y hace días venís entrando en mi mente una y otra vez. No puedo mas, siento que no aguanto, que quiero decirte un par de cosas.
Vos, vos venís y me decís que yo soy una basura. Vos venís y me decís que no podes creer lo que yo hago. Pero claro, mientras tanto, haces tu vida de lo más normal, porque creés que está bien.
Puede que a tu criterio esté perfecto, sé que si te pregunto me vas a contestar eso. Pero me parece, como te dije, que estás muy equivocado.
No sos el mismo, no sos la persona con la que compartí dos años y meses de mi vida. Con la que aprendí a amar, porque yo aprendí, pero parece que vos no. Aprendiste hace muy poco. O eso es lo que andás repartiendo por todos lados.
¿Dónde estás? ¿Dónde está esa persona que me decía que jamás lo deje, que nunca le falte? Que decía que yo era su otra mitad, su ángel que lo cuidaba…parece que esa manera de cuidarte, pasó a ser una pesadilla. Todas esas cosas que me decías a mi, cambiaron de destinataria… vos sabrás qué bien estás llevando tu vida, qué bien que la estás pasando.
Por mi parte, no te das una idea de lo bien que llevo las cosas. Sobre todo desde que vos pensás que en mí hay alguien más, y ni hablar desde que se que otras personas te tocan, te acarician, no sabés que bueno es saberlo! Creeme que jamás creí ser tan feliz.
Por favor, yo siempre pensé que me conocías, que sabias quién era… pero parece que no. Parece que vos tenés una imagen de mí que no pensé que tenías…
Equivocado, es poco. Errado, puede ser. Confundido, totalmente.
Si tu vida así es mejor, ¿de qué te sirve decirme que me querías recuperar? Usar tus manos, que sabés que me encantan para intentar acercarte a mí. Usar tu ironía, que siempre te dije que no te quedaba bien… usaste todo, hasta tu desconfianza para intentar encontrarme algo malo. Obvio, malo.
Hasta que lo encontraste. ¿No te gustó tomar de tu propio remedio? ¿No te gustó ver que otra persona estaba intentando meterse en mi vida? No, no te gustó. Pero cuando fui yo la que tuvo que tomar de tu medicamento, y tratar de no seguir enfermándome, lo disfrutaste como el mejor.
Cada cosa que hacías sabías cómo y cuánto me iba a doler… ¿pero te acordaste de mí? ¡No! Te recuerdo que no se te pasó por la cabeza que yo existía! Si total, la estúpida te iba a seguir el juego, se iba a bancar todo… se iba a VOLVER a bancar todo, porque te paso a contar, que no fue solo esta vez. No es la primera vez que jugás así. Y lo sabes muy bien. No fue la primera vez que escuché de tu boca “no me importa nada de vos”.
Estoy cansada de levantarme todos los días y caer en la realidad que vivo, en la realidad que me armaste. Lástima que siempre me la pintaste tan distinta. Si hubieras dicho las cosas desde un principio, no estaría yo acá sentada escribiendo esto. Vos, si hubieras pensado en las cosas que nos unían… no hubieras sido así!
Pero preferiste estar con tus juegos, tus amigos, tus chicas... (¡Veamos cuanto duran!) Sinceramente, creo que nadie te va a amar como yo lo hice. Más allá de que no haya sido perfecta, porque mil millones de veces me equivoqué, creo que fui siempre lo mejor que pude con vos. Siempre quise que vos estés bien, y no como vos pensás que yo lo único que quería era verte solo… no, a pesar de todas las cosas me banqué que no lo estés, ni estando conmigo… que no estés solo ni estando conmigo, qué frase horrible cuando la pensás... Pero bueno, al final, la mala de la historia terminé siendo yo… la egoísta, la mala mina, la falsa, la “careta” como te gusta decirme ahora. Cuando tendrías que replantearte si fue así.
Vos realmente tendrías que ver más allá de tus ojos, yo cuando llegué a hacerlo vi la cara de la luna que jamás había visto… eso me dijo una amiga, que yo siempre la tuve frente a mi, pero que nunca lo había notado. Por ahí vos estás viendo un lado de mí que no creías que tenía, y eso al parecer no te gustó ni un poco… Pero creeme que a mi me gustó menos haber conocido este lado tuyo.
Ver qué poco te importó haber terminado, haberme dicho “no estoy más enamorado de vos, no te veo ni siquiera linda”… eso sí que me dolió. No sólo esas palabras, si no muchas otras… fuiste capaz de decirme que querías estar solo, cuando ambos sabíamos que era mentira. No tardaste una semana en estar con otra, si es que no estabas antes de terminar conmigo.
Pensar esto me destruye cada vez más, de a poco, me consume. Pero vos lo que ves es el orgullo que me queda, lo poco que tengo… intento de la mejor manera seguir con mi vida, sabiendo que se me hace cada vez más difícil y que vos me la complicas todos los días un poco más.
Cuantas veces fuimos felices, cuantas veces sentí que te amaba tanto que mi alma estaba llena, que mi corazón no podía más con tanta felicidad… cuantas veces hacíamos el amor con solo mirarnos a los ojos…
Ahora ni siquiera puedo tocarte, no puedo sentirte cerca… cada vez estás más lejos de mí… de a poco te convertís en un extraño que vive y respira como yo. Sé que en algún momento de tu vida vas a volver a pensar en mí, y a acordarte de todo lo que pasamos juntos.
Ojalá sepas en tu interior todo lo que te amo, todo lo que siento por vos más allá del amor. Lo que me gustaría que estés acá, abrazándome e imaginando de qué manera vamos a amarnos esta vez, no lo cambio por nada.
Pero caigo a la realidad una vez más (una puta vez más) y pienso. Cada vez que actúa mi mente, y no mi corazón, las cosas dan una vuelta al mundo. Todo, pero todo cambia.
Muchas veces pensé que no nos íbamos a separar… y la cantidad de personas que nos veían y pensaban eso! ¿Algo inspirábamos, no? ¿Por eso será que todos los días me pregunto qué es lo que falló entre vos y yo…?
Si esto llega a tus manos algún día, será entonces porque no te volví a ver o será que no tuve el coraje para enfrentarte y decírtelo. Y si no llega nunca, fue la manera más sincera de decirte lo que siento. Todo lo que pasa por mi cabeza una y otra vez. Fue la manera de no llamarte, de no forzar el destino para encontrarnos y de no ir a buscarte o esperarte sentada en la puerta de tu casa, agarrarte de la cara y decirte ‘te amo, sos el más lindo, ¿sabés?’.
Como dije una vez, si tenemos que estar juntos lo vamos a estar. De acá a un millón de años o en solo un mes.
Me despido sin más nada que decirte. Espero volver a cruzar una mirada con vos, y que sepas todo lo que te quiero transmitir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario